Salsa madre o de bechamel que se obtiene al unir una mezcla de harina y mantequilla con leche. Tiene un sabor neutro, lo que la convierte en una preparación aprovechable en diferentes platos.
Ingredientes:
- 2 tazas de leche fresca
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharadas de harina
- Sal, pimienta, nuez moscada al gusto.
Preparación:
Hierva las dos tazas de leche fresca. Aparte, prepare un roux blanco con las dos cucharadas de mantequilla y las dos de harina. Cuando esté listo, añada la mitad de la leche hirviendo al roux caliente. Mezcle con un batidor de mano. Un minuto después incorpore el resto de leche. Cocine a fuego bajo de cuatro a cinco minutos. Cuele, sazone con sal, pimienta y nuez moscada. Vierta en un bol y cubra con una cucharada de mantequilla.
Consejos:
Puede enriquecer la salsa blanca con queso rallado, hierbas aromáticas, ají amarillo molido, aceitunas, mostaza, espinacas, etc. Prepare la salsa blanca en una olla de fondo grueso.
Esta salsa se utiliza en recetas con huevos, como los de souflés y pasteles; de pastas, como las de ravioles o lasañas y en gratinados.